Las Migas son cuatro mujeres poderosas, valientes y flamencas que regresan a la primera plana del panorama musical nacional y lo hacen con “Antonia”. Un primer sencillo que llega acompañado de un chispeante videoclip, y que sirve para abrir boca antes de recibir su próximo y esperadísimo disco, bautizado como “Libres”. Este nuevo trabajo verá la luz el viernes 22 de abril, y lo presentarán poco después, el miércoles 27 de abril en Luz de Gas, Barcelona, dentro de la nueva edición del Guitar BCN con un directo que promete ser toda una revolución.
“Antonia” es una rumba risueña y canalla, con pinceladas swing, con la que Las Migas nos invitan a celebrar la vida, la vuelta al mundo y a nuestro presente. Quizás sea porque ahora las necesitamos más que nunca, o porque su contagiosa alegría siempre nos hace cosquillas en el corazón y en los oídos, pero lo cierto es que no hay nadie mejor que ellas para despedir el frío invierno.
Pocas formaciones encontramos en el mercado musical patrio que atesoren virtudes tan notables como las que lucen Las Migas. Estas cuatro mujeres llevan más de dieciocho años conquistando escenarios nacionales e internacionales, dejando claro por qué se han convertido en todo un referente del flamenco más femenino, valiente y alegre.
En consonancia con esas cualidades disfrutonas, Las Migas han avanzado “Antonia”, el primer sencillo del que será su próximo trabajo de estudio y una declaración de intenciones en toda regla. Porque este single se presenta como una rumba colorida y guerrera, al estilo de nuestras protagonistas, que con sus aires swing ejerce como banda sonora perfecta para saludar a la dulce primavera que llega.
Ellas mismas nos cuentan que “Antonia” es una canción de, por y para la fiesta. “Con ella, celebramos la vida, la vuelta al mundo, al mar, a la naturaleza, a la fiesta, al presente”. Y es que solo hay que echarle un vistazo al fabuloso videoclip que se han marcado —¡Ay, quién pillara ese barquito!— para entender de qué va el asunto. “Antonia es una amiga nuestra bastante ligona, una devoramujeres”. Hasta que un día se cruzó con una morena que “con un latigazo de su pelo, a Antonia sin sentido la dejó”, tal y como reza su letra. “Así fue como cayó en las redes de esa morenaza —detallan— aunque, en esta ocasión, no le fue tan fácil la conquista”.
