La Fundación Ateneu de CCOO de les Illes Balears ha inaugurado la “Exposición Conmemorativa del 50 Aniversario del Proceso 1001” en la sede de CCOO en Palma, la exposición estará abierta al público hasta el 20 de enero. El evento contó con la destacada presencia de Nicolás Sartorius, abogado y militante histórico de CCOO, quien fue condenado en el proceso 1001 junto a Marcelino Camacho, entre otros.

La exposición tiene como objetivo rememorar el Proceso 1001, que juzgó a prominentes líderes de CCOO, miembros de su Coordinadora General. Este juicio se convirtió en un símbolo de la represión que sufrió el movimiento obrero durante el franquismo. Josep Benedicto, presidente de la “Fundación Ateneu de CCOO Illes Balears”, ha expresado que la Dictadura buscaba dar un escarmiento a Comisiones Obreras y al movimiento obrero, pero esto se volvió en su contra, generando una gran reacción de solidaridad tanto en España como en el mundo democrático.

Benedicto destaca que el Proceso 1001 demostró la capacidad del movimiento obrero para articular la movilización social, convirtiéndose en una pieza esencial en la lucha a favor de la democracia frente a la dictadura franquista. La exposición busca recuperar la memoria de uno de los eventos que marcaron el largo camino hacia la libertad.

Nicolás Sartorius ha señalado que siempre es apropiado recordar los hechos ocurridos durante la transición, especialmente este año que se cumplen 50 años del Proceso 1001. Sartorius recuerda que en este proceso se les solicitó una condena de 20 años de cárcel por hechos pacíficos y legales en toda Europa, calificándolo como un acto descomunal de represión que simbolizó la represión del régimen franquista.

El destacado activista ha destacado la importancia de la memoria democrática, subrayando que “si no hay memoria democrática, no hay una democracia muy sólida”. Abogó por la creación de una cultura democrática basada en la lucha contra la dictadura. Sartorius recordó que la democracia no es una concesión, sino una conquista lograda por la movilización de diversos sectores, incluyendo el movimiento obrero, estudiantil, vecinal y de las mujeres. En este sentido, insistió en la necesidad de que las nuevas generaciones conozcan esta parte crucial de la historia en la que se forjó la democracia.