La Técnica del Vidrio Soplado en España Alcanza el Reconocimiento de la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad
El comité de la UNESCO, reunido en Kasene (Botsuana), ha otorgado a la técnica del vidrio soplado en España el estatus de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Este reconocimiento, compartido con Chequia, Finlandia, Francia, Alemania y Hungría, resalta los conocimientos, técnicas artesanales y habilidades excepcionales empleadas en la fabricación de vidrio en el país ibérico.
La técnica del vidrio soplado en España tiene raíces profundas en la cultura local, con centros de producción destacados, como el Centro Nacional del Vidrio de la Granja en Segovia y los Vidrios Gordiola en Mallorca, que han mantenido su vigencia durante más de tres siglos. Actualmente, cerca de 140 talleres de artesanos y artistas distribuidos por todo el territorio buscan revitalizar esta tradición, a menudo vinculándose a museos para dar visibilidad a producciones características de centros ya extinguidos.
Este reconocimiento subraya la diversidad y riqueza de la producción de vidrio soplado en España, que no solo preserva modelos históricos, sino que también incorpora diseños contemporáneos, generando una amplia tipología de productos. Los procesos, conocimientos, productos y espacios arquitectónicos asociados a esta técnica representan un conjunto de valores históricos, inmateriales, tecnológicos y artísticos que merecen ser preservados para las generaciones futuras.
Con esta distinción, España suma otra joya a su corona de manifestaciones culturales declaradas Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. Enfocado en preservar y promover su rica herencia cultural, el país demuestra su compromiso constante a través de su legislación y planes estratégicos, como la Ley de Patrimonio Cultural Inmaterial y el Plan Nacional para la Salvaguarda del Patrimonio Cultural Inmaterial.
Además, España aspira a un papel destacado en el ámbito internacional al postularse como candidato para formar parte del comité evaluador de las candidaturas de Patrimonio Cultural Inmaterial en la próxima Asamblea General de Estados Parte de la UNESCO en 2024. Este reconocimiento refleja no solo la abundancia de manifestaciones representativas en la lista de la UNESCO, sino también la fuerte implicación del país en la gestión y conservación del patrimonio cultural inmaterial a nivel global.